martes, 13 de enero de 2009

Malen Melián, la muerte de una amiga

El 2009 empieza como terminó el 2008, con la muerte como protagonista. El año pasado fueron mis abuelos, era lógico, su tiempo estaba mas que agotado. Pero lo de Malen ha sido una muerte inesperada, a los 49 años le dio un infarto y murió cenando.

Malen era una de esas amigas de la niñez que conoces desde siempre, crecimos juntos, veraneamos juntos durante años y aunque la vida nos llevara por caminos distintos, cada cierto tiempo nos reencontrábamos. Era de esas personas que sabes que de verdad se alegra de verte y no sólo de compromiso. Siempre con el mismo cariño, el que no se pierde con el tiempo ni la distancia.

Malen era una mujer luchadora, que no tuvo demasiada suerte en la vida. Dos matrimonios rotos la habían marcado. Trabajadora incansable, leal a los suyos, con un gran sentido de la familia, amiga de sus amigos y muy reservada con sus problemas y preocupaciones.

Sentía adoración por sus hermanos, por sus padres y por sus hijos,(dos de su primer matrimonio y una niña de 12 años del segundo) en los que va a dejar un gran hueco difícil de llenar.

Acompañé a su familia el viernes y el sábado, tratando de compartir su dolor, dolor que desgraciadamente no me es extraño. Sé lo que es que se te muera un hermano, lo sé desde los quince años y sé lo que es que se muera tu madre, lo viví con la misma edad con la que lo están sufriendo ahora sus hijos mayores.

Por eso sé que no hay consuelo. Sólo hay lágrimas que verter en compañía de aquellos que te aman. Y dolor, mucho dolor y confusión, porque no eres capaz de entender nada. No comprendes cómo te puede estar sucediendo a ti.

Pero... aunque el túnel sea negro y profundo el amor y la familia pueden iluminarlo. Y la fe y las creencias, aunque no entendamos el plan de Dios, existe y hay que aceptarlo como nos llega. En ese plan estaba que Malen muriera joven, nos guste o no nos guste, simplemente es así.

Cuando empecé a escribir estas líneas, busqué poemas acerca de la muerte, tratando de poner palabras bonitas al dolor, he leído cientos y ninguno me ha gustado, o por lo menos no expresaban lo que quiero transmitir. Hasta que encontré este pensamiento de François Mauriac que dejo aquí cómo despedida:

"La muerte no nos roba los seres amados. Al contrario, nos los guarda y nos los inmortaliza en el recuerdo. La vida sí que nos los roba muchas veces y definitivamente."

 

Juan Carlos Domínguez siemens

5 comentarios:

JULIO GÓMEZ dijo...

Hola Juan Carlos

JULIO GÓMEZ dijo...

Hola Juan Carlos, o "Pocas Ganas". Perdona por colarme en tu block, pero es que te leí en el artículo del INTERNADO- de Campillos, y por tu fotografía creo que nos conocimos en el internado. Yo soy Julio Gómez de Ceuta, me llamaban El Moro. Creo recordar a un canario amante del golf, que siempre tenías revistas de golf, pelo rubio rizado . . ., no estoy seguro si eres o no.
No obstante quisiera pedirte un favor si pudiera ser. Estoy recopilando fotografías y recuerdos de aquella época. Posiblemente se publique un libro.
Si tuvieras algo que pudieras mandarme, no importa quien este en la foto, lo importante es que este hecha en Campillos. Si guardas un boletín de notas de aquellas . . .
enfín lo que puedas y de camino recuerda a ver si me recuerdas, yo creo que sí. Un seguro excompañero JUlio Gómes - El Moro.
Espero tus noticas, te facilito mi correo :
julio5033@hotmail.com

Anónimo dijo...

Patxi, soy Lourdes la nuera de malen (novia de su hijo Carlos), que bonitas frases le has dedicado,me han emocionado mucho. muchas gracias y un saludo.

Anónimo dijo...

Julio, busca en Facebook un grupo que se llama "Fui internado en San José de Campillos"

Anónimo dijo...

Genial brief and this post helped me alot in my college assignement. Say thank you you as your information.